2014, Karen Kearley, Mary Selwood, Ann Van den Bruel, Matthew Thompson, David Mant, FD Richard Hobbs, David Fitzmaurice, Carl Heneghan
Objetivo:
Los nuevos dispositivos electrónicos ofrecen la oportunidad de mejorar la detección de la fibrilación auricular (AF), que es una arritmia cardíaca común y un factor de riesgo modificable de accidente cerebrovascular, en los entornos de atención primaria de rutina. Nuestro objetivo es evaluar el rendimiento de un monitor de presión arterial (BP) modificado y dos dispositivos de ECG de un solo paso, como pruebas de triaje de diagnóstico para la detección de la AF.
Ajuste:
6 Prácticas Generales en el Reino Unido.
Participantes:
1000 pacientes ambulatorios de 75 años o más.
Medidas de resultado primarias y secundarias:
Exactitud diagnóstica comparativa del monitor de presión arterial modificado y los dispositivos de ECG de un solo electrodo, en comparación con el estándar de referencia de un ECG de 12 electrodos, interpretado independientemente por los cardiólogos.
Resultados:
Un total de 79 participantes (7.9%) tuvieron AF diagnosticada por un ECG de 12 derivaciones. Los tres dispositivos tenían una alta sensibilidad (93.9–98.7%) y son útiles para descartar la AF. El WatchBP es una mejor prueba de triaje que el autoanálisis de Omron porque es más específico—89.7% (95% CI 87.5% a 91.6%) en comparación con el 78.3% (95% CI 73.0% a 82.9%), respectivamente. Esto se traduciría en una tasa de ECG de seguimiento más baja del 17% para descartar la AF en comparación con el 29.7% con el mensaje de texto de Omron en la problación del estudio. La especificidad general de los ECG de derivación simple analizados por un cardiólogo fue del 94.6% para Omron y del 90.1% para Merlin.
Conclusiones:
El WatchBP funciona mejor como prueba de triaje para identificar la AF en la atención primaria que los monitores de ECG de derivación simple, ya que no requiere experiencia para su interpretación y su rendimiento diagnóstico es comparable al de los análisis de ECG de derivación simple realizados por cardiólogos. Podría utilizarse oportunamente para examinar a los pacientes ancianos en busca de AF no diagnosticada a intervalos regulares y/o durante la medición de la BP.